Pensamientos «Gratitud»

«¡Oh, Dios mío! No sé yo quien os debe más, si aquel que se cayó, y Vos lo levantasteis o aquel a quien quitasteis los tropiezos del camino para evitarle que dada su debilidad cayera»
Madre Amalia Martín

¡Cuánto os debo Señor! Y que mal os he pagado y os pago los cuidados que habéis tenido y tenéis con mi pobre alma»
MAM

«Gracias, Señor, porque en los momentos más dificiles y duros de mi vida, has puesto cerca de mí quien con caridad me prestara su ayuda y me diese ánimos para caminar entre penas y oscuridades»
MAM

«Gracias, Señor, por tu gran bondad para con mi pobre alma ya que has querido que al final de mi vida no me falte quien con caridad me sea medio para ir a Ti»
MAM

«En los días de prueba pusiste cerca de mí quien en tu nombre me ayudase a buscar y poner toda mi confianza en Ti. Bendito seas Señor porque en tu gran bondad miras desde tu altura con amor de Padre a los más pequeños y necesitados»
MAM

«Señor, te doy gracias por lo que he sufrido y te pido la ayuda de tu Gracias para seguir sufriendo por Ti»
MAM

Pensamientos «Nuestra Congregación»

«Para llegar a Cristo no hay otro camino que el Calvario, ni otra escalera que la Cruz. El saber subir esta escalera con amor es vivir el carisma de nuestra Congregación»
Madre Amalia Martín

«Estamos en la Congregación para amar a Dios, y en Dios a la humanidad»
MAM

«Para ganar almas, la Congregación debe valerse de todo y de toda clase de sacrificios, pero ¿qué importa, si lo ponemos en manos de Cristo Crucificado para el bien de sus miembros dolientes, los pobres?»
MAM

«Que por amor a Cristo y a nuestra Congregación, sepamos morir cada día y a cada momento a todo, para que sea Él, el todo de nuestra vida»
MAM

Pensamientos «Amor a los hermanos» MAM

«Cierra, Señor, mis ojos a los defectos ajernos y ábrelos a los propios»
Madre Amalia Martín de la Escalera

«Usemos con el prójimo tres caridades:
Caridad de corazón para amarlos a todos;
Caridad de lengua para no murmurar de ninguno;
Caridad de generosidad para socorrerlos a todos en sus necesidades»
MAM

«Hagamos el bien solo por Dios y no tendremos que llorar ingratitudes»
MAM

«Tanto más crecerá en ti el amor al prójimo, cuanto más en Dios le ames»
MAM

«No juzgaríamos mal de nadie si supiéramos cuántas veces somos juzgados injustamente»
MAM

«No amó Dios a los pobres con amor de compasión o benevolencia, sino con amor de hermano, confundiéndose con ellos»
MAM

«Si quieres ser perfecto: «Anda, vende lo que tienes y dalo a los pobres». Señor, no tengo bienes terrenos pero quiero vender todo cuanto tengo: mi voluntad, mi salud, y dárselo a los pobres por amor a Ti»
MAM

«Señor, quiero ser toda tuya y en Ti y por Ti ser toda para mis Hermanas»
MAM

Pensamientos «Voluntad de Dios» MAM

«Los acontecimientos de la vida son los mensajeros más seguros de la voluntad de Dios»
Madre Amalia Martín

«Para conseguir el espíritu de Cristo, debo ver en todas las circunstancias de la vida y en todas las disposiciones de mis Superioras la Voluntad de Dios Padre, como Cristo la vió y la vivió»
MAM

«Vivir con Cristo, vivir para Cristo, vivir la vida de Cristo; cumplir en todo la voluntad del Padre, imitación de Cristo»
MAM

«Igualmente glorificó Cristo al Padre, de Niño en Belén, como de obrero en Nazaret, como de martir  en la Cruz, como Resucitado y glorioso subiendo al Cielo»
MAM

«Él mismo nos lo dijo: ‘mi alimento es hacer la voluntad de mi Padre’. Nuestra santidad no consiste en otra cosa, que en hacer la Voluntad de nuestro Padre Dios»
MAM

«Cuando en tus ocupaciones estas cumpliendo la Voluntad de Dios, estás haciendo lo mejor y lo más agradable a Él»
MAM

Contemplación

La vida de oración empieza cuando llegamos a la contemplación, entra primero en juego el pensamiento, sigue el darnos cuenta de que estamos en contacto con Dios y el recuerdo agradecido a tantas gracias recibidas de Él.
El principiante para empezar su meditación, se sirve (generalmente) del pensamiento y la imaginación, que le representan actos y escenas naturales, que piadosamente le impresionan, más cuando el alma llega a mayor unión con Dios, abarca en un solo acto de gracia, todo lo que en este mundo puede sentirse y gozarse del mismo Dios. Esto es a mi pobre juicio, oración de unión o contemplación, que no siempre Dios concede, pero que con humildad debemos pedirla y prepararnos para cuando Él con su gran misericordia se digne concedérnosle aunque sea de paso.

 

Escritos Madre Amalia Martín de la Escalera
Libreta escritos desde 1923
Archivo General Casa Madre “Villa Pilar”

La imagen verdadera de Cto. Cdo.

Al mirar una imagen de Cristo Crucificado, aun siendo obra del mejor de los artistas, no creamos que son éstas verdaderas imágenes de aquel Dios hombre clavado en una tosca cruz de madera, con el cuerpo deshecho a fuerza de golpes y latigazos, con el rostro cubierto de polvo, empapado de sudor y sangre que brota de las heridas causadas por las espinas de la corona que ciñe su cabeza, y con la mirada triste de un agonizante que se siente morir entre angustias y abandonos. No, no queramos grabar en nuestra alma la falsa y piadosa imagen de vida a la sentimental inspiración del artista! No olvidemos que el salmista dice hablando de Él (de Cristo), “gusano soy, que no hombre, el desecho de los hombres”, mientras más al vivo imaginemos la figura real de Cristo Crucificado, más comprenderemos la magnitud de su amor, porque la medida del verdadero amor la da el dolor sufrido por el amor, ¿y quién nos dio mayor prueba de amor que Él, el divino crucificado? ¿cómo correspondemos nosotros a la infinita grandeza de este amor?

 


 

Los artistas nos presentan un Cristo Crucificado según el sentir de su arte, un Cristo de rostro hermoso, de peinada y rizada cabellera, agradable a la vista del que lo contempla, pero el Cristo Crucificado real no aparecía bello para la vista humana lejos de esto, el profeta nos le pinta y dice de Él: “Varón de dolores”, “gusano de la tierra”, “ante el cual se vuelve con repugnancia la cabeza”, así habla el profeta y yo me he preguntado muchas veces, por qué ese afán ese como miedo de los grandes hombres del arte, de  presentarnos un Cristo tan falto de realidad? No será porque temen, que ante esa imagen realista, volvamos la cabeza como los judíos, si no con asco, con vergüenza y miedo ante las justas exigencias que de nuestro amor tiene derecho a esperar toda la realidad de ese Dios hombre, hecho gusano por amor al hombre!

 

 

Escritos Madre Amalia Martín de la Escalera
Libreta escritos desde 1923
Archivo General Casa Madre «Villa Pilar»

Cristo – A las Hnas de Cto. Cdo.

Cristo Crucificado con sus brazos extendidos, es para nosotras un libro abierto que tiene por atril la Cruz.
Este hecho podría titularse: “el libro del amor”

En el prólogo de dicho libro veremos el hecho prodigioso del salto gigante dado por Dios, que por amor a la humanidad caída por el pecado, desciende del cielo a la tierra y se hace hombre en la persona del Verbo.

En el epílogo descubriremos toda la trama del misterio escondido por Dios desde la eternidad, el misterio sublime de nuestra redención, que empezando en el seno de una Virgen (María) tiene por final el drama sangriento del Verbo de Dios muerto en la Cruz.
Pero si hermosos son el prólogo y el epílogo de ese libro, no son menos dignos de admiración y veneración, los misterios sublimes que en los hechos y enseñanzas el mismo libro nos ofrece porque el Verbo (Cristo) no se hizo hombre solo para morir por el hombre y salvarle, esto que bastaría sobremanera para nuestra redención no pareció suficiente para demostrarnos el gran amor que el Padre y el Hijo y sus Espíritu, sentían por la humanidad caída por el pecado; porque era preciso que los hombres, que debido al pecado de Adán habíamos de nacer inclinados al mal y que cegados por nuestros apetitos y malas pasiones, no podríamos por nosotros mismos encontrar ni seguir el camino para llegar a alcanzar el cielo perdido, hablásemos en la divina persona de Cristo (el Hombre perfecto), luz para caminar y ejemplo para imitar y virtudes que aprender.
De ahí la pobreza del portal de Belén, que nos habla del desprecio de los bienes caducos de la tierra, para merecer los bienes eternos del cielo, de ahí también la vida oculta de Nazaret, que es trabajo y recogimiento; y el sermón de las “bienaventuranzas” que son como el código de la santidad, y esa oración del Huerto, modelo de entrega a la voluntad del Padre, que fue siempre para Cristo y debe serlo igualmente para nosotras, el único móvil de nuestras acciones.

Cristo nuestra luz,
Cristo nuestro modelo,
Cristo el alfa y el omega
de nuestro caminar al cielo.
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En ese libro divino colocado en el atril de la Cruz, aprendamos como se ama.

 

Libreta apuntes escritos desde 1923
Archivo General Casa Madre «Villa Pilar»

Pensamientos «Oración» MAM

«Cuando se habla mucho interiormente con Dios, pocas palabras hacen falta para llenar de amor las almas»
Madre Amalia Martín

«Si amas a Dios, deja descansar el pensamiento en Él sin esfuerzo ni violencia»
MAM

«¡Qué dulce es la soledad y qué grato el silencio, escuchar lo que el amor sin palabras va diciendo!»
MAM

«Escóndete si quieres, Jesús mío, pero no permitas que me canse de buscarte»
MAM

«La vida de oración, la vida de unión con Dios, es el fin único de nuestra vida religiosa»
MAM

«Mírame Jesús, para que merezca que vuelvas a mirarme»
MAM

«Para que fuese el hombre capaz de conocer a Dios, o tendría que ser Dios tan pequeño como el hombre, o el hombre tan grande como Dios»
MAM

«Que ninguna ocupación interior turbe nunca aquel rinconcito intimo de nuestra alma en el que María debe permanecer siempre a los pies de Cristo»
MAM

«Vana es la ciencia si, quedándose en el entendimiento, no llega a encender la voluntad»
MAM

«Así como un granito de arena basta para cegar los ojos, así el más pequeño apetito desordenado basta para oscurecer el alma»
MAM

«Vivamos muy unidas a Él para que el motor del Amor Divino sea el que de fuerza y vigor a nuestros actos»
MAM

«Vengo de Dios y a Dios voy; nuestra vida es un viaje de circunvalación de Dios a Dios»
MAM

«La oración, la penitencia, la ejemplaridad y la mortificación, han de ser las bases sobre la cuales todo apostolado se afiance»
MAM

«Ese deseo que sientes de buscar a Dios, no te viene de ti misma, sino de Dios que antes deseó que le buscases tú para hacersete encontradizo»
MAM

«Si no te conoces ‘sal fuera’, así dice el Esposo a la esposa en el Cantar de los Cantares: porque el alma que desea gozar las dulzuras del beso del esposo que es la contemplación, ha primero de conocerse a sí misma para humillarse y despreciarse»
MAM

«La contemplación es el acto supremo y de mayor espiritualidad; es la posesión de Dios cuanto cabe gozarse en la vida»
MAM

«Aquella alma está más unida y transformada en Dios cuanto más vacía  se halla de su voluntad propia y más conforme con la voluntad de Dios.
Señor, que yo trabaje en vaciarme de mí, para llenarme de Ti»
MAM

 

Pensamientos «Vida de fe» MAM

«Todo cuanto nos sucede en la vida nos viene de Dios. Así cuando alguien nos haga sufrir, no nos quejemos de él, quejemosnos de Dios; más al hacerlo, miremos al Crucifijo»
Madre Amalia Martín

«Dios quiere tratarnos como a fuertes y nos niega todos los gustos; pero cuanto más recia es la tempestad, más alegre brilla luego el sol»
MAM

«Pongamos en las alturas la mirada, que allá en el cielo está nuestra morada»
MAM

«Dos alas necesita el alma para elevarse: la gracia divina que es obra de Dios, y la cooperación a esta gracia que es obra nuestra»
MAM

«Mientras más escondidas estén a los ojos de Dios y de los hombres los actos de virtud que por Dios hacemos, más seguras estaremos de que son actos de amor»
MAM

«No busquemos en el suelo
dichas que no dan hartura,
busquemos en las alturas
la dicha eterna del Cielo»
MAM